Con un equipo inicial con muchos pibes y la idea central de conseguir el control en la mitad con Cirigliano y Ballon, Cappa volvió a cambiar la formacion y los nombres, aunque los malos resultados se repiten.
El millo jugo un muy mal primer tiempo en el que no genero peligro al arco de Cambiasso y en el que fue salvado por Carrizo para no irse al descanso en desventaja. En el entretiempo Cappa nuevamente metió mano, otra vez lo incluyo a Ortega para que juegue 45 minutos. A partir de ahí, River tuvo mas claridad en ataque pero solo por jugadas individuales del jujeño, o alguna intervención del siempre movedizo y peligroso Pavone. El único gol de la tarde llegaría al minuto 9 del complemento, cuando Ferrero salio mal y dejo el hueco para que el uruguayo Rodriguez pusiera el 1-0 que cerraría el partido. Después, el técnico puso todo lo que tenia en ataque y el equipo mostró una leve reacción, pero la gran jugada que logro Pereyra o el remate de Bounanotte después de un rebote, no quisieron entrar y River se fue de Floresta con las manos vacías.
Llegamos a un punto bisagra del campeonato y de la temporada. Una situación que es mala pero que puede ser mucho peor, por eso es el momento de reaccionar, y qué mejor oportunidad que el próximo martes 16 en un nuevo Superclasico. Esperemos que todo River lo entienda así también.
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