
El ex Lazio no es cualquier arquero. Además de ser el mejor bajo los tres palos, es un líder nato para cualquier equipo. Su personalidad es parte de su éxito y, una de las cosas que lo ha llevado a ser el arquero de la selección para la Copa América.
Por todo esto, es dificil entender a los pocos hinchas que critican a JP. Solo dos errores (muy groseros) en 34 partidos que lleva la temporada y ya se pone en duda su compromiso con el equipo. Lo cierto, es que él fue el único ex River que volvió de Europa para poner el pecho a esta situación. No jugaba en Zaragoza pero, hubo otros que en su mismo lugar prefirieron quedarse cómodamente en las ligas europeas (como Demichelis o Cavenaghi).
El difícil presente del millo no debe nublar las vistas de los hinchas. Lo mejor será estar unidos, ser uno con el equipo y los jugadores y tirar para el mismo lado que quedan cuatro semanas que prometen ser las más duras de la historia del club.
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